08 Ago Alemania reforzará su unidad de inteligencia financiera contra la financiación del terrorismo
Las unidades supervisores antiblanqueo alemanas, dependientes del Ministerio de Finanzas, se están reforzando ante las últimas informaciones que colocan a este país como uno de los centros preferidos para lavar dinero teniendo en cuenta su posición de liderazgo económico y financiero.
A partir del próximo 2017, las UIFs germanas contarán con el “Departamento VII A3 a”, una nueva división situada en la Oficina de Aduanas y que trabajará fundamentalmente en la financiación del terrorismo con una dotación de 50 funcionarios, una plantilla que podría aumentar hasta los 160 a lo largo de año.
El objetivo de esta nueva unidad será, además de detectar operaciones sospechosos en coordinación con el State Prosecution Service y la German Custom Office – INZOLL y ponerlas en conocimiento de la Fiscalía, identificar los métodos que se utilizan para lavar dinero en el país y que están relacionados con las actividades terroristas.
Además se pretende que exista mayor colaboración con las autoridades locales y trabajo conjunto con otros estados y organismos internacionales.
De manera complementaria se van a realizar reformas legislativas que contribuyan a ser más efectivos en la prevención, control y persecución del blanqueo de capitales
Y es que sobre todo a nivel de los estados federados se hace necesario este refuerzo ya que son los responsables de todos los sectores fuera del de finanzas, como por ejemplo, el inmobiliario o el de la alta joyería.
Esta es una de las primeras medidas integradas en el plan de acción internacional de diez puntos para combatir la evasión fiscal y el blanqueo de capitales que el titular de Finanzas, Wolfgang Schäuble, hizo público en mayo de 2016 tras hacerse público el escándalo de los Papeles de Panamá.
Como antecedente, en diciembre 2015, un mes después de los atentados de París, el ministro de Finanzas francés, Michel Sapin, visitaba a su homólogo en Berlín y fruto de esa reunión se lanzaba la iniciativa de que cada país miembro de la UE creara una unidad especial para combatir la financiación del terrorismo.